Es un proceso por el cual se convierte un mapa en papel (o físico), o cualquier dato que pueda ser expresado con coordenadas (digitalización de planos catastrados, georreferenciación de imágenes, conversión de proyecciones, transformación de coordenadas, entre otros) en un formato digital (Fig. 1), de manera que pueda ser incorporado en un Sistema de Información Geográfica (SIG) para un uso posterior determinado (ESRI, 2017).
Fig. 1. Uso del programa ArcGIS para realizar digitalizaciones en los Sistemas de Información Geográfica.